Se habla de “garantía de implantes dentales” porque representan en muchos casos la intervención más costosa para un paciente de odontología. Por tanto, se quiere tener la seguridad de que, si algo no sale correctamente, es posible subsanarlo sin mayor coste.
Hay que tener en cuenta que los implantes dentales son en realidad elementos que se han diseñado para sustituir piezas dentales que ahora ya no tenemos. Básicamente se atornillan al hueso del maxilar o la mandíbula como si fuesen las raíces y el resultado suele ser un éxito, tanto a nivel práctico como también estético.
Problemas más comunes al ponerse implantes dentales
La mayoría de los problemas relacionados con los implantes dentales se producen antes de que finalice la unión del implante con el hueso (osteointegración).
Siempre se realiza una valoración previa con la que se analiza el estado de las encías y tejidos óseos, con el fin de confirmar si el implante dental puede ser realmente una solución definitiva. A pesar de ello, pueden desarrollarse consecuencias negativas para el paciente imprevistas.
Los problemas potenciales con los implantes dentales son varios:
- Perder el injerto.
- Que se infecte la zona.
- Sentir dolor y/o inflamación.
- Presentar hematomas.
- Alteraciones neurosensoriales.
- Laceraciones en la piel.
Estos problemas, en caso de producirse, aparecen al poco tiempo de la intervención. Por tanto, son situaciones que cubre la garantía de un implante dental.
Ahora bien, con el paso de los años pueden desarrollarse otros problemas relacionados con los implantes dentales. De hecho, enfermedades periodontales o como la diabetes también pueden afectar al éxito a largo plazo de esta operación y requerir una reparación o la reposición del implante dental. Lo mismo puede suceder ante malos hábitos continuados como es el caso de los fumadores.
En la mayoría de las situaciones en las que un paciente tiene que acudir a su clínica por un problema relacionado con los implantes dentales suele encontrarse que, tras aproximadamente una década de uso, la parte superior o corona se ha desgastado o dañado.
¿Qué garantías por ley se tienen con los implantes dentales?
La garantía de implantes dentales por ley está delimitada en la Ley General para la Defensa de los Consumidores y Usuarios, así como también en otras leyes complementarias y establece un plazo máximo de dos años y por defecto de fabricación.
Pero en la práctica es algo compleja la aplicación de esta ley, porque se presume un defecto de fabricación si el problema es evidente durante los 6 primeros meses de la garantía.
Si el daño se comunica pasado este período, ya no existe esta presunción y, por tanto, el paciente debe demostrar que no ha sido provocado por una acción indebida por su parte, algo que puede ser difícil de exponer y justificar.
Ante una situación legal algo delicada, las clínicas dentales deciden ofrecer a sus pacientes una garantía específica. Antes de esta intervención, te recomendamos consultar estas condiciones en la tuya.
En cualquier caso, el mejor consejo para evitar problemas relacionados con los implantes dentales, tanto si hablamos de prevenirlos como de preservar su mejor estado posible, es acudir a revisiones periódicas en tu clínica odontológica.
Un seguro dental, como el que ofrece Divina Seguros, es el mejor aliado en estos casos. Te permitirá ahorrar tanto en las visitas periódicas a tu dentista para cuidar de tu salud bucodental, como también para prevenir cualquier problema que pueda surgir.